sábado, 14 de noviembre de 2015

Dónde acabará esto.

Basta ya. BASTA YA. Cuando toca de cerca se ve con otros ojos. Tristemente me suelo incluir. Será la absurda comodidad que por gracia nos rodea por estos rincones del mundo. El pellejo de otros que por pura injusticia lo viven a flor de piel. Y no, por favor, que termine ya todo esto. 

No se puede uno acostar con los ruidos de sirenas, de las que no indican nada bueno, y gritos de personas de esta forma. No. Son personas joder, como tú y como yo. PERSONAS. Poco debería importar calificativos autoimpuestos al nacer. Quiénes somos nosotros para que nos impongan algo.

¿Quiénes merecen ser escuchados así?
Nadie, repito, NADIE.



Escribo esto únicamente porque no merecen ningún otro gesto estos horrores que el estar unidos más que nunca. Pero no como naciones. Como mundo. Seres humanos en contra de estas injusticias sin horarios, al azar. Como bloque somos imparables. No tengo ninguna duda. Sólo cuando nos unamos como grupo único a lo largo de ambos hemisferios valoraremos cada segundo de suerte que es la vida. Jamás debe ser arrebatada por el egoísmo mental de una minoría. Porque sí, todo lo que no sea parte de ese grupo único de personas racionales, es minoría. Somos más los que tenemos dos dedos de frente, que preferimos salir sin miedo por el centro de una maravillosa ciudad, ir a un concierto con tus amigos o ver un partido de tu país para disfrutar de ambiente y noche. Para eso nos dieron la vida. Para aprovecharla. Pero sobre todo, y mucho más importante, para vivirla como cada uno elija.

Que no vaya a más por favor. Cierren filas. Acabemos con esto. Con pequeñas aportaciones, somos más. Se ha demostrado lo que situaciones como esta genera en el mundo. Colas enormes de gente con pancartas, llenando calles y avenidas en las ciudades-emblema demográficas. Que escuchen. Todos estamos gritando. Basta ya.

Lejos de las palabras de injusticia. Mi más sincero apoyo. Rezo por París, como he leído por aquí esta noche a todas horas. Rezo por París porque así lo siento, pero también por el resto de puntos del planeta que necesitan más avenidas inundadas por personas a diario. Necesitamos que se corra la voz que ellos también necesitan. Tristemente es la misma situación. Intentemos no olvidarnos de nadie. 

Descansad en paz ya que en vida no os dejaron. 
Sin fronteras somos uno.

Écoutez-nous, sans frontières nous sommes un.

No hay comentarios:

Publicar un comentario